Tomando la Palabra a Juan Francisco…

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Por: José Antonio Matos Peña

En su periódico digital, de fecha 1-2-2020,  el amigo y comunicador de vastísima experiencia, enumera gran parte del suplicio que ha correspondido a nuestros productores agropecuarios, principalmente a los productores de café y plátanos; este mal, resulta certeramente transversal a toda la agropecuaria y sistema de vida de nuestra región, la Broca, Roya y las Sigatocas, Negra y Amarilla.

Nada más real y crudo como lo narrado por el distinguido articulista, lo vivido por los productores de la región Enriquillo no puede ser peor, los canales de regadío, para ampliar el aspecto a que nos referimos, va desde la ineficiente contribución estatal para el combate a  las enfermedades referidas anteriormente.

También en renglón ganadería, quien escribe, habla por experiencia propia, los predios agrícolas están siendo vendidos, a como le den, en cierto sentido, parece que vamos rumbo a pequeños latifundios, con los que, al no haber regulaciones serias, el tiburón, se va tragando la sardina, dicho, en sentido figurado, donde se instalan estos nuevos productores, instalan sus sistemas de riegos en desmedro de los pequeños que les rodean, sufriendo la peor suerte.

Eso es así, las distribuciones de aguas por sectores y comunidades, nos dan la razón, cuando por ejemplo, en la presa de Sabana Yegua, dicho por las juntas de regantes de estos territorios denunciaron el incumplimiento del tandeo; 33% Ysura- Barahona, Tamayo, Neiba y Jimaní 67%; aguas abajo, en las distribuciones de las mismas, entre el Consorcio Azucarero Central y las siguientes zonas, a todo esto, se suma la falta de construcciones o reparaciones de medios de conducción de aguas, ya , a sectores como Cachón Seco, el Memiso, Estero, etcétera no llegan las aguas del Lateral Neiba, debido a las causas enumeradas anteriormente.

Recientemente visitó nuestra  región Enriquillo, el ingeniero Leonardo Faña, el cual en su ponencia, expresó la problemática de los productores de café en el país, y dijo, que nos hemos convertido, de  exportadores de café, a importadores, y lo que más me impactó, fue el inventario nacional de café,  quién aseguró que solo tenemos unas cuatrocientas mil tareas de sembradío del mismo en el país, la misma suma o tareaje  de siembras que poseía la región Enriquillo,  hacen varios años, ¡Patético, Verdad!!!…..

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